¿Por qué asegurar tu empresa si nunca has tenido ningún problema?

¿Por qué te interesa que tu empresa esté asegurada?

¿Por qué asegurar tu empresa? Es una pregunta que se escucha con frecuencia. No son pocos los empresarios que todavía se resisten a contratar seguros. No hablamos precisamente de ejecutivos de grandes multinacionales, sino, más bien, de propietarios de pequeñas y medianas empresas, el tipo de negocio que da forma a la mayor parte del tejido económico de este país.

Las razones son variadas, pero casi siempre orbitan en torno a una misma cuestión: la falta de utilidad. Empresarios que tienen un seguro y se quejan de que jamás han tenido que recurrir a él, otros que echan cuentas y deciden que no pueden permitírselo… e incluso los que aseguran, con sorprendente tranquilidad, que si les surge cualquier problema ya se ocuparán de cubrir los gastos.

Son solo tres ejemplos de lo que muchos gerentes de negocios piensan sobre la utilidad y la necesidad de los seguros. Y tienen algo en común: desconocimiento y despreocupación.

Desconocimiento, decimos, porque es muy habitual que los directivos simplemente ignoren la oferta de seguros que existe para su sector, así como su coste real. De ese modo, el seguro se convierte en simplemente algo que se paga cada mes… para evitar no se sabe muy bien qué.

Y aquí es donde entra en juego la despreocupación. En primer lugar porque, admitámoslo, todos tendemos a caer en la pequeña trampa mental del “eso no podría pasarme a mí”. Y en segundo lugar, porque es demasiado habitual que los gerentes de las empresas no tengan en cuenta cuáles son los riesgos específicos de su sector, riesgos a los que alegremente se exponen cada día.

Sí, probablemente muchos empresarios se espantarían si se parasen a pensar en todos los imprevistos que fácilmente podrían acabar en un momento con todo el tiempo, el dinero y el esfuerzo invertidos durante años. Sobre todo, si se diesen cuenta de, sí, por desgracia… todo eso también podría sucederles a ellos.

No es una cuestión de vivir atemorizados, ni mucho menos. Es más bien decidir tomar las riendas y evitar que una parte tan importante de la vida (piénsalo, ¿cuánto tiempo pasamos trabajando? ¿Cuánto tiempo le has dedicado a tu empresa hasta ahora?) esté en manos del azar.

Conocer los riesgos y conocer las soluciones. A partir de ahí, tomar decisiones. Y con ambas cuestiones nosotros, como profesionales independientes, podemos ayudarte. Contacta ahora con nosotros en el 944 219 617 o escríbenos a info@prodisle.com y te enviaremos un consultor que te explicará todos los detalles, sin ningún compromiso.

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